martes, 31 de mayo de 2016

CERVEZA DEL DÍA: ST. FEUILLIEN TRIPLE BELGA

St. Feuillien Triple



Descripción

St-Feuillen Triple es una cerveza dorada fuerte belga que está certificada como una de las 17 Cervezas de Abadía oficiales que hay en el mundo. El monasterio de St- Feuillen se inauguró en el año 1125 y los monjes empezaron a elaborar cerveza allí. El nombre viene de un monje irlandés llamado Feuillen, que llegó a Bélgica en el siglo VII.




ASPECTO

Cerveza color ambar claro con una cabeza blanca compacta que persiste. 10,5EBC

CONSUMO PREFERENTE

Marzo 2017

SABOR Y AROMA

Cerveza con un aroma intenso con una combinación única de lúpulos aromáticos, especias y muy afrutada. La segunda fermentación en botella le da un aroma único por la presencia de la levadura. Tiene un sabor fuerte y persistente por su densidad y su largo periodo de maduración. Para saborear con cuidado por su alto contenido alcohólico. 32 EBU

TEMPERATURA DE CONSUMO

8-10ºC

ALCOHOL

8,5% alc 18ºPlato

ACOMPAÑAMIENTO

Como aperitivo antes de comer o para ser saboreada durante los meses de invierno. Acompañamiento ideal de los quesos de corteza dura.

INGREDIENTES

Malta Pils, Lúpulos aromáticos, Especias.

OTRAS CERVEZAS DE LA FÁBRICA

Saison, Grand Cru, Grissete y St. Feuillen Blonde/Brune/Réserve y Cuvé de Noël.


Historia de la fábrica


Al disfrutar de una cerveza de abadía belga se podrá degustar los frutos de una larga tradición que afortunadamente todavía hoy en día perdura. Durante siglos, las abadías fueron el “motor” de la economía.
Por otra parte, como los monjes sabían leer y escribir, la gente a menudo les atribuía un status de “científico”. 
A lo largo de los siglos los monjes han hecho contribuciones significativas al desarrollo de la ciencia de la elaboración de la cerveza. Sin embargo, las abadías no estaban a salvo del fuego, la guerra o el saqueo. La Revolución Francesa (1789-1794) fue el toque de la muerte para muchos.
Los monjes se vieron obligados a huir y muchos edificios fueron reducidos a escombros. Desde el siglo XIX en adelante, las nuevas abadías fueron fundadas o de lo contrario, los monjes re-establecieron en edificios las abadía existentes que se renovaron desde los cimientos. Las cervezas de abadía belga más antiguas datan de este período.

Las Cervezas de Abadía no son un estilo de la cerveza belga protegido. El nombre cubre cervezas relativamente fuertes, doradas y oscuras, así como las triples y cuádruples más fuertes. Hay una amplia variedad de aromas y sabores. Las cervezas de abadía belga, con la excepción de las trapenses, son elabroradas por fábricas de cerveza normales que pagan un canon a las abadías por el uso de su nombre.  En muchos casos estamos hablando de abadías que dejaron de elaborar cerveza hace mucho tiempo y sólo sus ruinas dan testimonio de un pasado cervecero glorioso. La Federación de Cerveceros Belgas clarificó la historia de las cervezas de abadía en 1999 mediante la creación de la marca de calidad “Cerveza Abadía Belga Reconocida”en un intento de contrarrestar los excesos comerciales. Este sello de aprobación asegura al consumidor que existe un vínculo histórico demostrable entre la cerveza y una abadía actual o anterior. Los ejemplos pueden incluir los escritos antiguos que se refieren a la actividad de elaboración de la cerveza, dibujos o pinturas que representan una fábrica de cerveza o hallazgos arqueológicos relacionados con la elaboración de la cerveza hecho dentro de los muros de la abadía. Hoy en día, aunque los propios monjes no están involucrados en la elaboración de la cerveza, se encargan de la imagen de marca de sus cervezas de abadía  supervisar su reputación y se aseguran de que se cumplen las normas de comercio ético.

En el caso de St. Feuillen, en el siglo VII, un monje irlandés llamado Feuillien llega al continente para predicar el evangelio. Desgraciadamente, en el año 655, cuando cruzaba un bosque perteneciente a lo que hoy es el pueblo de Roeulx, fue martirizado y decapitado. En el lugar donde se produjeron los hechos, sus discípulos erigieron una ermita que, por iniciativa del obispo de la cercana ciudad de Cambrai, en 1125 se convertiría en una abadía de monjes premonstratenses. Poco después se la conocerá como “Abadía de Saint Feuillien de Roeulx”. Esta abadía prosperó hasta la Revolución Francesa, cuando sufrió graves daños, al igual que muchos otros establecimientos religiosos. Como era típico en esa época, los monjes de esta abadía fabricaron durante siglos cerveza para consumo propio. Esta tradición de la St. Feuillien se mantiene hasta nuestros días, aunque ahora ya no son los monjes los que elaboran la cerveza, sino la familia Friart, en su cuarta generación.