Es una cerveza con carácter por su color y con un volumen de alcohol elevado debido al añadido de miel o azúcar.
Ingrediente:
¿Como la hacemos?
Poner a calentar 10 litros de agua y cuando el agua empiece a estar caliente (40º) añadir toda la malta (en bolsa de maceración si se tiene) e ir subiendo la temperatura suavemente hasta los 67 grados. Dejar que macere a esa temperatura durante hora y media. Luego, elevar la temperatura hasta los 75 grados y mantener 10 minutos más. Luego, retiramos la bolsa y aprovechamos bien todo el almidón que contiene vertiendo sobre ella el resto del agua que debe añadirse a nuestro mosto en la olla.
Volvemos a calentar el mosto añadiendo los lúpulos y la miel (o el azúcar) que deben cocer durante una hora. Enfriamos la mezcla y pasamos al fermentador y dejamos fermentar a temperatura ambiente de 20 a 22 grados durante 8 días. Si pasado este tiempo la válvula siguiese teniendo mucha actividad de gas dejamos uno o dos días más.
Cuando se ha completado la fermentación podemos opcionalmente pasar la cerveza a un fermentador secundario durante dos días para que se clarifique. Si no nos importa la cerveza algo más turbia, podemos embotellar, añadiendo un poco de dextrosa en cada botella.
Un saludo y gracias por vuestro tiempo.
Nos vemos en los bares.
Amigos y cerveza fría, como mínimo una vez al día.