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Robert Craig se sirve de la receta autóctona de su abuela para mostrar diferentes tipos de la bebida dorada
Náquera alberga la bodega de Robert Craig, la única que se dedica a
hacer cerveza artesanal australiana en España. Partiendo de una receta
original de su abuela, Rob juega con los lúpulos y las maltas originales
australianas para hacer diferentes tipos de cerveza. Actualmente tres
tipos diferentes de la bebida le sirven de iniciación en un mundo
cervecero que aprende a saborear mezclas de nuestras antípodas. «Con
gustarle a una persona me basta. Así ya soy feliz», destaca con
optimismo el joven maestro cervecero.
La informática le llevó a España y la familia a asentarse en tierras
valencianas. Rob nunca olvidó la cerveza que hacía su abuela en
Australia para el consumo familiar. La práctica de hacer su propia
cerveza está bastante extendida por nuestras antípodas, pero aquí no es
habitual. El joven australiano nunca perdió esa pasión y decidió
emprenderse en una aventura que mezclaba sus orígenes y la lucha por un
futuro incierto en la creación cervecera artesanal en nuestros
territorios. Así nacía Ophidian Brewing Company, la cerveza artesanal
australiana hecha a las puertas de la Sierra Calderona.
En pleno auge de las cervezas artesanales, Rob ofrece una rica
variedad de sabores. Él se encarga de asegurar cada paso de la cadena
productiva de su bebida. Las noches son el momento idóneo para ver al
joven Rob llevar a cabo un trabajo minucioso en el que le da "cariño y
amor" a sus mezclas. «La cerveza australiana y la española no tienen
nada que ver. La australiana tiene sabores diferentes, se hace con otras
proporciones de ingredientes y es más intensa y amarga», detalla con
facilidad el maestro cervecero. La pale ale, la negra y la tostada las
fabrica en su centro de Náquera, aunque ya ha empezado a probar nuevas
mezclas con resultados bien diversos.
El proceso de producción se alarga durante un mes completo, como
mínimo, «en principio estamos hablando de un periodo de una semana de
fermentación y tres más de reposo, pero se pueden variar según la
cerveza que quieras obtener». Así, Rob tiene claro su reto en el mundo
de la cerveza, «mi objetivo es hacerlo bien, que sea diferente y que
tenga buena calidad».
El sabor lleva de cabeza a Rob que relata la gran variedad de
detalles que marcan las cervezas de su país. Es por ello que cuenta que
no hay dos cervezas igual y reconoce que "unas salen mejor que otras",
pero aún así, siempre anda buscando la combinación perfecta de lúpulos y
cebada.
El maestro cervecero relata sus duros inicios hace siete años. Desde
aquel momento se día a día se llena de probaturas, de mezclas y de
mediciones para obtener el mejor resultado. Nuevos sabores y nuevas
bebidas le llenan la cabeza a Rob de imaginación. El hidromiel y el
gingerbeer (cerveza con jengibre) también salen de las barricas de
Náquera.
La marca vive un momento de expansión y sus cervezas son ya habituales en concursos y locales de la Comunitat.
Así, Rob pretende expandir el resultado de su receta familiar. 14.000
kilómetros de distancia pero la bebida dorada nos da la posibilidad de
disfrutar de nuestro entorno con el sabor más puro de la tierra de los
canguros.
Nos vemos en los bares.